Desencanto político, ¿a alguien le importa?

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En los últimos tiempos, Parla se ha convertido en asunto de máxima actualidad. Hemos salido en los medios nacionales e internacionales más prestigiosos (incluido el Financial Times y este próximo domingo en el programa Salvados de Jordi Évole) por cuestiones de descalabro económico e intereses políticos, principalmente. Se nos conoce por el tranvía (cuya prestación de servicio se pone en duda cada dos por tres), la supuesta deuda astronómica de nuestro Ayuntamiento y, por supuesto, por nuestro exalcalde, Tomás Gómez.

Algunos de vosotros habréis notado que en los últimos tiempos he dedicado menos espacio de este blog a la política local. Para ser sincera, me he decepcionado bastante con todo el circo que se ha montado de un tiempo a esta parte. ¿Por qué? Pues porque tenemos problemas, muchos problemas y los responsables políticos de esta ciudad no están palpando la realidad. Unos que si salen en los medios diciendo una cosa; otros, que lo niegan y desmienten. Y, ¿quién se ocupa mientras tanto de mis vecinos?

Sé que tampoco sirve de mucho este berrinche virtual porque los propios medios locales no tenemos demasiada voz dentro de la ciudad. Me doy por contenta si algún vecino me lee y está de acuerdo conmigo o, si al menos, me da su impresión sobre el asunto.

He decidido que mientras que no tenga la sensación de que la gente que rige este municipio (gobierno, oposición,... todos) trabaje por los vecinos, no volveré a hablar de política. Tocaré el resto de temas, por supuesto, porque tenemos una ciudad muy rica en muchos aspectos. Y digo yo, ¿a alguien le importa?